1.1. La interactividad
1.1.1. Introducción
Diariamente hablamos de interactividad y de sistemas interactivos de manera muy amplia, pero ¿qué significa realmente que algo sea interactivo? ¿Qué elementos ha de tener un sistema para poderse considerar que lo es o que no lo es? Es probable que estas preguntas ya os las hayáis planteado en repetidas ocasiones a lo largo del máster. Sin embargo, pensamos que es importante empezar esta asignatura reflexionando sobre la interacción y la interactividad y, de alguna manera, cómo podemos llevar al extremo e incluso desmontar las definiciones existentes.
Pensad en los siguientes ejemplos: un reloj de sol, un reloj de agujas, un reloj digital y un smartwatch. De todos estos, ¿cuál o cuáles consideramos que son un sistema interactivo? Todos comparten la misma función básica de dar la hora, pero como usuarios nos comunicamos con ellos de manera diferente. Entonces, ¿qué características tienen los que son interactivos, que no las tienen los que no lo son? Y la respuesta no es añadir smart o decir el nombre en inglés.
A lo largo de este apartado veréis que usamos el término sistema para referirnos a artefactos o productos interactivos. Hablamos de sistemas porque no nos referimos a un objeto aislado, sino a un conjunto de elementos que actúan unos sobre otros. Nos fijamos, pues, en cómo estos elementos se relacionan entre sí y en cómo responden a las acciones del usuario.
A continuación veremos algunas definiciones y categorizaciones sobre interacción y otros términos que nos harán entender mejor de qué hablamos y qué hace que, a pesar de compartir la misma función, hablemos de sistemas interactivos o no.
Se incluirán referencias a la bibliografía, así que os recomendamos que la hayáis leído.
Entre todo lo que se ha escrito sobre interactividad, encontramos muchas descripciones de este concepto. Aquí hablaremos de dos en concreto para poder enlazar mejor con otros conceptos que veremos a lo largo de la asignatura.
Empezamos por la de Stolterman. Os recomendamos que leáis su artículo, si no lo habéis hecho, para poder entender con detalle todo aquello a lo que haremos referencia a continuación.
Stolterman (2017) describe la interacción como «el proceso comunicativo entre un sistema que incluye una orden o una respuesta por parte del usuario o interactor».
Antes de entrar en detalle, merece la pena recalcar que en esta definición se usa el término interactor como sinónimo de usuario. Es un término más genérico y menos sesgado respecto a un tipo especial de propósito y circunstancia de la interacción.
Es importante hacer énfasis en el concepto de proceso o serie de acciones, puesto que el propio autor no acaba su definición aquí. En su artículo va un paso más allá e introduce el término interactibilidad para hablar de la habilidad de un sistema de ser interactuable. Esta propiedad es la que permite a un sistema llevar a cabo el proceso de la interacción.
Usando su definición, hablamos de interactibilidad cuando nos referimos a la cualidad de un artefacto o sistema que permite que haya interactividad. No es el proceso, sino la capacidad o el potencial para poder ser interactivo, y por lo tanto podemos hablar de diferentes niveles de interactibilidad.
Así pues, podemos decir que la interacción con un sistema (proceso) es posible gracias a la interactibilidad (propiedad). El concepto de interactibilidad está muy presente en los textos de Stolterman y hace especial énfasis en él para demostrar cómo esta propiedad se ve incidida por el diseño. Para facilitar las cosas en el contexto de esta asignatura, nos referiremos al proceso como interacción y a la propiedad como interactividad.
Si volvemos al ejemplo que hemos presentado al inicio, podemos ver claramente a qué se refiere. Pensad comparativamente cuáles son los grados de interactibilidad del reloj de sol, del de agujas, del digital y del smartwatch. Como veremos más adelante, el grado de interacción es diferente entre estos sistemas, pero no hablamos de interactividad cuando hablamos del reloj de agujas. El concepto de agencia es útil para explicarlo. Las acciones tanto de los interactores como del sistema se guían por algún aspecto del diseño interno con el objetivo de lograr alguna finalidad.
En otras definiciones de interacción esta idea vuelve a aparecer.
«A series of related actions between two or more agents where (1) at least one of them is an artificial system that (2) processes its responses according to a behaviour specified by design and (3) takes into account some of the previous actions executed by them».
Estas dos definiciones presentan el concepto de agencia como entidad, como algo que puede realizar acciones. Y, de hecho, autores como Andrew Pickering la describen como un elemento básico de la influencia que puede tener una entidad en su entorno. En pocas palabras, la agencia trata de «hacer cosas en el mundo» (Pickering, 2002).
Cuando hablamos de agencia, aquello que puede llevar a cabo acciones en un sistema artificial (ordenador, teléfono, etc.), nos referimos al hecho de que este sistema procesa las acciones según un comportamiento predefinido (programación), que tiene en consideración el contexto previo. Esto puede servir para abrir cuestiones que vayan retomándose después.
Sin entrar en mucho más detalle, os dejamos dos definiciones más para ver cómo hay elementos en común que todos los autores emplean cuando hablan de interactividad.
«A cyclic process in which two active agents alternately (and metaphorically) listen, think, and speak».
«An expression of the extent that in a given series of communication exchanges, any third (or later) transmission (or message) is related to the degree to which previous exchanges referred to even earlier transmissions».
Como hemos visto, para hablar de interactividad e interacción, nos encontramos con muchas definiciones que, a pesar de compartir los elementos clave, incluyen matices. Lo esencial es entender los elementos comunes entre las dos:
- Que hay una comunicación entre un usuario y un sistema.
- Que este sistema lleva a cabo acciones a partir de sus acciones previas o de órdenes o respuestas del usuario.
- Que hay un elemento de agencia que atribuimos a estos sistemas y que es el que hace que lleve a cabo las acciones.
Antes de avanzar, recordemos también la diferencia entre interacción e interactividad, los dos conceptos clave de este apartado.
Nos referimos a interacción cuando hablamos del proceso comunicativo entre un sistema y un interactor, mientras que el término interactividad hace referencia a la propiedad de este sistema que hace posible que exista dicha comunicación.